La naturaleza de un imaginario fluctuante, sobre el río que atraviesa su territorio, evidencia el sentimiento que transmite dentro de su lenguaje pictórico de varias proyecciones gestuales de materia cromática. Su imaginario personal, que ella modifica de acuerdo con una visión subjetiva, está íntimamente relacionado con una emoción y con un concepto sobre el lenguaje de la pintura. Afirma que “pinto lo que siento y pienso y no estrictamente lo que veo”.
A través del patrón pintado con un pincel espontáneo, en varias de sus producciones realizadas bajo un impacto emocional, se despliega un estilo personal que no deja de transmitir la alegría del acto de pintar.
Rosa Faccaro. Miembro de la Asociación Argentina e Internacional de Críticos de Arte
Sintiendo el pulso de la vida Su obra actual, de espíritu abstracto combinado con referencias figurativas, destaca por la fuerza a través del color y la libertad que se manifiesta en las formas. Algunos elementos y mucha sensibilidad son los recursos que aplica la artista a la hora de componer sus cuadros. Una obra de arte que se revela con la alegría de la artista que le provoca la pintura.
El pensamiento se realiza a través de un juego de vibraciones y tensiones producidas por el espacio, la línea y el color, logrando una metodología abstracta relacionada con la música. Cabrera Grohs no puede escapar de su carácter audaz y seductor; nos lleva a su particular universo emocional, logrando la inmortalidad. Es su manera femenina de hacernos conscientes de nuestras propias raíces, el paso del tiempo y esa frontera sutil entre la vida y la muerte que transforma el mundo material en espiritual.
Dueña de una obra de arte vibrante y sensible, la artista nos lleva a su propia búsqueda y es así como logra un diálogo íntimo y profundo con el público. Si la esencia de la imagen es hacerla visible, los cuadros de Ana nos hacen sentir.
Marcela Costa Peuser, Directora Ejecutiva Arte al Dia
En el Museo Provincial de Bellas Artes, la artista entre Ríos Ana Cabrera Grohs expuso sus obras en una exposición individual denominada “Sentir”.
En la ocasión estuvo acompañada de un numeroso público que conversó con la artista y expresó comentarios positivos sobre sus pinturas. Entre los más destacados, Delight, In Freedom, Meeting, Garzas en el agua, The Light, Large Water, Spark in Orange, pinturas realizadas en acrílico sobre lienzo con un formato enorme que impacta visualmente en el público por el uso de colores y tonos vivos combinados con creatividad que denotan su plasticidad y pasión por las bellas artes.
Sus pinturas reflejan sus orígenes costeros donde el río y los paisajes circundantes se evidencian en sus obras de arte con una habilidad natural.
El Diario, periódico de la ciudad de Paraná, Entre Rios, Argentina.
Ana Cabrera Grohs es una artista conocida por realizar pinturas de arte contemporáneo que van desde lo figurativo hasta lo abstracto. A través de sus obras logra cada vez más libertad interior y creatividad. Para realizarlos generalmente se utilizan lienzos, aunque algunos están pintados sobre papel o madera. Para lograr variados matices de colores y texturas, utiliza pintura al óleo, acrílica y técnica mixta.
Los temas que la inspiran provienen de su deseo de encontrar cómo pintar la naturaleza, tomando de Argentina y América sus montañas, sus paisajes marinos, sus playas, sus flores, y los temas que hablan de la vida interior y la celebración del amor.
ECURED, Enciclopedia Cubana
Mucho se ha dicho que el verdadero abstraccionismo busca a toda costa alejarse de la realidad, ese lastre capaz de restringir la inspiración del verdadero artista, nada más lejos de la verdad. Tras la separación total del universo concreto-sensible, bajo las formas más gestuales o aleatorias, se encierra un referente inmediato de cualquier pintor abstracto: su subjetividad, ese tamiz íntimo por el que se filtra lo real para quedarse, por fin, con las emociones, las sensaciones y sentimientos que luego se convertirán en óleo sobre lienzo. Ya lo decían los griegos: Ex nihilo nihil. De la nada no surge nada. En este sentido, las abstracciones de Ana Cabrera Grohs, constituyen un excelente ejemplo para explicar cómo se tiene a sí mismo un pintor no figurativo. Y con él, todo lo que le rodea, porque según el artista, sus obras brotan de su mundo y de sus circunstancias, de sus vivencias más íntimas.
Llegan a ser una especie de autobiografía emotiva cuyo autor escribe con técnicas pictóricas, en lugar de lápiz y papel. Pero esas emociones surgen de sus relaciones familiares y amorosas, de su tristeza y soledad, de todo lo que observan y aprenden. Es decir, estas emociones nacen de una realidad que permanece en ellas hasta que Ana la reconfigura de nuevo, le quita o le da colores, la disecciona y la entremezcla para dejarla, por fin, en la superficie maleable del lienzo.
Y luego entramos en la galería, y vemos a la pintora disuelta en sus óleos, y a su lado, todo lo que ha visto y sentido. Ana es su pintura. Pero ella no está sola. Lo real lo acompaña, al menos, lo real como insistimos en definirlo, visto solo desde su perspectiva creativa, filtrado por su delicada subjetividad. Ella es la unidad de una multitud. Ella es la Mucho. Entonces, con una letra mayúscula. Ana Cabrera Grohs es una legión.
Msc. Maikel José Rodríguez Calviño, artista y poeta cubano.
El arte de Ana Cabrera Grohs es una expresión vibrante de los sentimientos internos de alguien que tiene mucho que decir y ha encontrado una manera de decirlo insuperable. Ana pinta desde el corazón y su corazón está lleno de color y vida y vitalidad. Si cuelga uno de sus cuadros en la pared, no es simplemente una imagen de algo. Es una parte del artista que te habla y te levanta el ánimo cada vez que lo ves. ¿Cómo captura la vida y las emociones? Ana ha encontrado el camino. Tiene un gran futuro y su trabajo cobrará importancia a medida que más y más personas se expongan a él.
David Phillips. Director de Publicaciones – Fine Art Registry-U.S.A.
Ana Cabrera Grohs crea, a través de su particular manera de atraer la luz y el significado del movimiento de la existencia, representaciones del mundo que en un primer acercamiento pueden parecer vertiginosas en ocasiones y agradables en otras. La sospecha surge al prestar atención pensativa al mismo tiempo que nos encontramos con voces y silencios, instalados en los colores y en las figuras. Un marco que atraviesa el abismo sin convertirse en lo que debería ser: una puerta. “El hombre pasa”, dijo Blanchot: “siempre ha pasado… pero al pasar grita… no grita: es el susurro del grito”. La exuberancia de los colores rojo y azul, atravesados por una amplia paleta de aperturas, exhibe la estética de su particular voz interior sostenida sobre los colores amarillos de la aparente tranquilidad de sus paisajes protegidos por un cielo despejado. Digo aparente porque transmigra del caos de algunas de sus abstracciones a las formas que posteriormente asigna a la naturaleza y a las representaciones humanas. El orden que les confiere, proviene de algún lugar alto y sus criaturas miran a la luz, exhibiendo sus espaldas (Iniciación) muy similar a la concepción platónica del mito cavernario. ¿No crees que es en contraste donde mejor se debate dicho pedacito de silencio, entre la palabra indefinida y la presencia de mujeres sentadas, como si estuvieran en una etapa de contemplación?
El cuadro con el Iris apuntando al centro, ¿es una restitución? Elementos delicados entre la fuerza de una naturaleza exuberante. Interrumpir es la instalación de la forma humana mirando la entrada de una cueva, un lugar misterioso en sí mismo. Puede ser una transposición poética del mito del origen con la presencia de lo indefinido y la conjugación, en otro momento de la serie de la naturaleza y su proyecto manifestado.
Sin embargo, sus pinturas combinan la sensibilidad sensual con la sensibilidad espiritual. Es una combinación que no tiene nada de paradójico, sino una convivencia armoniosa y absoluta, donde también puede haber vacilaciones. La vitalidad y fuerza de las líneas y los colores rompen la rutina misma, poniendo el silencio del cuadro en su mejor lugar. Las metáforas dan profundidad a lo inmediato, en la certeza que nos brinda su visión del mundo, otra interpretación.
Julia Rocha, crítica de arte y profesora
El arte, en todas sus expresiones, requiere una especial contemplación como posibilidad modificadora de la condición humana. Para que esto suceda debemos encontrar la pista donde la exigencia de expresión se proyecta inevitablemente por el gesto de color y el material. Y la persona que ejecuta dicho gesto, exponiendo, incluso con la más suave caricia, toda su vida. Creo que la obra de Ana Cabrera Grohs se revela de la manera antes mencionada, significando fuertemente las imágenes que la habitan, como una artista tenaz. Con mucho optimismo y conciencia, su obra difunde la vitalidad de una artista notable, una naturaleza fértil que crea permanentemente una síntesis expresiva loable. Creando metáforas desde la intensidad, Ana Cabrera Grohs determina la búsqueda interminable de la luz, la vida y el encuentro con otras revelaciones. Su proyecto es una decisión ética acorde con la sensibilidad, donde la tierra nos proporciona cada día nuevas inspiraciones.
Luis Debairosmoura, artista visual y profesor de arte.
Para Ana Cabrera Grohs, el acto de pintar representa un viaje, una aventura hacia los reinos de la experiencia, la sensación y la emoción personales. Aunque sus composiciones son decididamente abstractas, hacen referencia a distintos sucesos en la vida de Cabrera Grohs, tanto internos como externos, que ella comunica a los espectadores no solo a través del arte en sí, sino también a través del acto de crear ese arte.
La inspiración llega a Cabrera Grohs en una multitud de formas y de una variedad de fuentes, internas y externas, y es el proceso de tomar esas inspiraciones y materializarlas en arte lo que agrega significado a su trabajo. Sí, sus pinturas enriquecen visualmente la vida de todos los que las ven, pero también enriquecen a nivel cerebral, espiritual y psicológico.
Belleza, descubrimiento, crecimiento, conciencia, evolución: estas cualidades y más están incorporadas en la obra de arte de Cabrera Grohs. Cada pintura que crea revela una historia y se erige como un testimonio estético de la vida tal como la vive. Su arte tiene un significado personal para ella, por supuesto, pero también le ofrece posibilidades a usted, el espectador, en el sentido de que lo invita a participar en su visión y, en última instancia, a encontrar ese significado especial propio.
Alan Bamberger-Estados Unidos.
This post is also available in: English (Inglés)